Los encierros en San Fermín, las fallas en Valencia, el ferial en Sevilla, las hogueras de Alicante……… y la gente en el Pilar. Siempre vendemos esto, que es como no decir nada. Como si las fallas, los encierros, la feria tampoco tuvieran gente, conciertos y ambiente en la calle.
Por esto, vamos a contar a los amigos de fuera que es el Pilar. Si te apetece me puedes ayudar.
Pero la verdad es que, a pesar de que el Pilar es algo más que la gente, a pesar de su fama, las fiestas de Zaragoza no tienen mucha antigüedad, ya que se remontan a principios del siglo XVIII.
Cada pueblo solo tiene una fiesta grande y en Zaragoza durante siglos esta fue el día del Corpus. Pero el zaragozano necesitaba tener una fiesta propia (el Corpus se celebraba en todos los lados), y por eso, fuera del calendario tradicional y agrícola de las fiestas mediterráneas, las fiestas del 12 de octubre es una creación de la voluntad popular que logra festejos y litúrgias a su gusto, sacando a la calle lo que el pueblo quiere ver. ¡Anda!, si al final será verdad que es la gente lo que el Pilar vende.
El porque se celebra el 12 de octubre tiene su origen a que en 1118, Alfonso el Batallador toma Zaragoza e instaura la sede del Arzobispado en la Mezquita Mayor. Al año siguiente, el 12 de octubre esta mezquita fue dedicada a El Salvador. Una buena excusa para coger un día de fiesta, aunque las primeras grandes fiestas no se celebrarían hasta 1723, incluyendo en su programa toros de ronda, toros de fuego, mojigangas y carros triunfales….. vamos, más o menos como el día del Corpus (entonces, el único día del año en el que salían los gigantes y cabezudos, de los que hablaré otro día).
Lo dicho, si te apetece hablamos entre todos de nuestra fiestas del Pilar.
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