miércoles, 25 de agosto de 2010
Estamos convirtiendo la tierra en un parque temático
La cultura del Parque temático, todo limpio, bien ordenado, todos encaminados por el mismo sendero y de buen rollito, se extiende por todos los lados. Y sobre todo con seguridad, esa seguridad llevada a tales extremos que no hacen sino coartar nuestra libertad.
Me aburren los centros de interpretación. En todos los sitiios aparece uno. Y normalmente, o todos muestran lo mismo o no muestran nada porque los aparatos tecnológicos no funcionan. El acabose lo encuentro en el de las Lagunas de Neila, en el pueblo de Neila, abierto en la iglesia de San Martín, que resulta más interesante que lo que exponen. Una iglesia que está declarada Bien de interés cultural, de la que no se tiene constancia documental del origen de la Iglesia de San Miguel de Neila, pero la existencia de inscripciones reutilizadas en los muros, permite afirmar de la presencia del templo en el año 1.087. Pudo construirse en el siglo XI,y entre sus elementos valiosos encontramos la pila bautismal o las pinturas románicas ( un pantocrator) aparecidas tras la retirada del retablo barroco del ábside. Así mismo se encuentra en los muros de esta iglesia la inscripción más antigua del románico burgalés, que hace referencia a la fecha de construcción del edificio. Todo esto queda en un segundo plano para explicarnos como es un pino.
Y luego está el tema de los cartelitos con el que están sembrando el Pirineo. Paseando por Gistaín a más de 1500 metros de altitud, gente, lo que se dice gente, no te encuentras (un par de montañeros en toda una jornada), pero carteles....... Y por duplicado. Porque a los que ya existían hace años de madera, han añadido al lado, sin quitar los anteriores unos de metal poniendo lo mismo (ver foto), además del nombre de la empresa que los ha fabricado, una tal NYD. Luego están los que te prohiben hacer todo: Acampar (siempre se han hecho vivacs cuando se va de travesía), fuego (no se que se va a quemar haciendo una hoguera en los lagos de Millares), perros sueltos no (mira que no soy amigo de los perros, pero porque no pueden ir sueltos por el monte ¿será que sus caquitas desentonan con las de las ovejas, caballos, vacas y sarrios del entorno?)........ El cartel más incoherente, pero bien grande y hermoso, me lo encuentro en la bifurcación del camino entre Viados, la ruta al Posets y a los lagos de Millares. Un acrostico con la palabra SEGURIDAD en la que nos recuerdan todo lo que tenemos que hacer y llevar cuando andamos por el monte (bien calzado, llevar agua, ropa de abrigo, de lluvia, mapas o gps......). Mira que si llegas hasta ahí y te falta algo de eso........ Y luego la lista de teléfonos de urgencia: bomberos, cruz roja, 112....... lo que no dice es que allí no hay cobertura.
Lo mismo ha pasado este verano en el Pinar Grande soriano, un laberinto de pistas de asfalto y tierra. Este año lo han "balizado" con postes de madera y una plaquita de plastico para designarlo como ideal de la muerte para ir en bici. Cada 500 metros te encontrabas un poste, uno a cada lado. Y luego, al lado de los carteles carreteros que señalan dirección o kilometros a tal o cual pueblo, adjuntan otros de maderita y con un diseño moderno diciendote la misma información, pero para los biciclistas. quien llega hay con bicicleta ya sabe donde está, no necesita que le dupliquen la información. Suena al chiste de las campanas del reloj: ¿Que hora es?, la una, e¿estas seguro?, hombre.... lo he oido ods veces.
Antes sabiamos leer un mapa y orientarnos con una brujula, identificar los mojones y las señales del camino. Una mala concepción de la democratización del espacio y de la seguridad por encima de todo hara que terminemos viviendo en Port Planetaterra disney.
Cada día sabemos más para ser más inutiles. La humanidad gestiona bien los momentos de escasez. Pero se vuelve limitada cuando nada en la abundancia.
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