CARTAS COFRADES IV: María hecha Pasión.

Del mismo a los mismos.
Uno de los fenómenos más interesantes, junto a la aparición de los costaleros y la recuperación de la música de banda, que han surgido en torno a nuestra Semana Santa en la última década es la creación de las asociaciones culturales que dinamizan el calendario cofrade con sus propuestas, estudios, actividades y deseo de preservar las tradiciones de la Semana Santa zaragozana o incluso darle un toque de vanguardia inconcebible en el discurrir de la liturgia y actos de las cofradías. Atrás quedan los tiempos en que, de Pascuas a Ramos, solo disponíamos como actividad estable desde 1983 el ciclo cultural de la Cofradía del Señor atado a la Columna y sus inolvidables exposiciones en la Sala Barbasán de la calle don Jaime.
Aunque ya hace días, y gracias las redes sociales, conocemos la puesta en marcha del concurso de la Web Capirotes y Terceroles y los carteles anunciadores de distintas web y flickr de cara al 2011, esta tarde del 11 de febrero la Asociación Cultural Rotonda Cesaraugustana ha dado el “adelante con los faroles” de esta larga pre-cuaresma al organizar las jornadas “María hecha Pasión”, donde darán a conocer el arte y la iconografía mariana de nuestras procesiones, además de la historia y estética de la indumentaria y la manera de vestir a nuestras vírgenes en Semana Santa. La jornada de hoy, con una ponencia a cargo de Carlos Pardos sobre la Virgen en nuestros pasos, y la presencia de un maestro bordador venido directamente desde Sevilla y de un estudioso de la indumentaria tradicional, con modelos incluidos, ha sido de lo más interesante. Mañana contaremos con una conferencia de Wifredo Rincón sobre la iconografía de la Mater Dolorosa. Enhorabuena a los miembros de la Asociación por esta propuesta tan instructiva.
La verdad es que las jornadas sobre la Virgen María han coincidido con una semana en la que, y gracias a las redes sociales y una magnífica foto de Jorge Sesé, hemos tenido la sensacional noticia de la restauración por parte de Francho Almau de la Virgen Dolorosa que realizara Palao en 1856 para la Hermandad de la Sangre de Cristo y que desde 1994 viviera el ostracismo en la sala capitular de San Cayetano.
A mí la foto me ha creado sentimientos contradictorios por lo que ha significado esta imagen y por lo que no volverá a ser. Fue la imagen en torno a la cual se creó la Sección de la Virgen de los Dolores en 1938 dentro de la Hermandad de San Joaquín, siendo su titular hasta 1949. En 1987, con motivo del Cincuenta Aniversario de la primera salida procesional de la Sección de la Virgen de los Dolores, es rescatada de la Sala Capitular de Santa Isabel para el culto público. Se coloca en una sencilla peana y participa junto a la carroza y la imagen de Calero en la procesión del Santo Entierro de ese año, y en exclusiva en la procesión de la Soledad hasta 1994. Deja de procesionarse en 1995. El motivo fue la no autorización por parte de la Sangre de Cristo para disponer de la imagen por su mal estado de conservación y la necesidad de restaurarla. Siempre he pensado que los esfuerzos de la Dolorosa deberían haber ido en la dirección de restaurar la imagen, esperando el mejor momento para limar cierto “conflicto”, encontrar las personas capaces de mediar en el asunto, y destinando el montante económico de la realización de una nueva imagen en la recuperación de, como ha dicho esta tarde Carlos Pardos, la escultura “más interesante y curiosa” de nuestra imaginería, tallada y policromada en su totalidad, lo que le confiere una distinción en el conjunto de obras de este estilo dentro de la tradición española. Una Virgen con postura de Venus. Espero no pensar una vez más en el titulo de la novela de Tom Wolfe que llevara al cine Brian de Palma, y que la imagen de Palao, entre 2012 y 2013, reciba el reconocimiento necesario en la celebración del 75 aniversario de la Fundación de la Dolorosa.