Paisajes de mi ciudad: Las Quinielas

El Pasaje Palafox está más cerca de tener una nueva vida. En plena remodelación están a punto de desaparecer algunos detalles que recuerdan un pasado más esplendoroso. Algo parecido le pasa a las quinielas. El 1X2 del pasaje es el único cartel que se mantiene de tiempos anteriores. A las quinielas les pasa lo mismo. Tuvieron épocas mejores.

Siendo el juego de azar más divertido, en una época en que junto a los "ciegos" y la lotería, era el único juego de apuestas permitido (también tuvimos canódromo todo hay que decirlo), el fútbol moderno lo ha relegado y nuevas formas de apostar lo está arrinconando cada vez más al ostracismo.

Aquellas tardes de radios en carrusel, con casi todos los partidos a la vez y la quiniela delante, en donde la combinación de resultados, en algún momento, te creaban la ilusión de poder ser millonario hoy en día son inviables. 

Una vez acerté una de 14. Vi que era fácil pero aún me hice la ilusión de pillar unas 100.000 pesetas y comprarme una cadena musical. Todo se quedó en 10.000 pesetas.

Es difícil que acierte una quiniela, cuando juego con tres resultados fijos: victoria del Real Zaragoza siempre y derrotas, siempre también del Real Madrid y del Barcelona.