Te mandé un wassap en cuanto me enteré por medio de "Pasión en Zaragoza" de que todos los días, a las 20 horas, Ángel Nápoles realizaba una visita guiada a la exposición "Nuestra Historia se hace Arte". Dijiste "Me lo apunto". como no te vi entre las casi cincuenta personas que nos congregamos el domingo aún te la recomiendo más, recordando que la exposición concluye el domingo 15. Merece la pena. Y de paso ves también la de los 360ª en San Cayetano 3.
Merece la pena la exposición. Una más de las que celebran nuestras cofradías en años conmemorativos, ahora a vueltas con los 75, pero como esta cofradía tiene de todo y mucho, son capaces de llenar y dar contenido, fondo y forma a las naves de San Cayetano. Si el año pasado una de estas cartas afirmaba que quien se quisiera llevar una impresión del patrimonio sonoro de nuestras tambores lo conseguiría colocándose en la calle Manifestación, presenciar esta muestra permite llevarte la esencia y el ADN que define las cofradías y las procesiones zaragozanas, pues como te decía lo tienen todo de todo. Todo lo que pueda llegar a procesionarse lo tienen ellos o lo han tenido. Y aún tienen proyectos para seguir aumentando. Por eso es importante oír la explicación en la visita, pues como dice Ángel todo tiene explicación y justificación.
Llevo casi veinte líneas y me doy cuenta de que no he nombrado a la cofradía protagonista. Pensaba que leyendo "Nápoles", como diría mi amigo Manolo Sales "toda una vida atado a la columna en el buen sentido de la palabra", sería evidente que hablamos de la Real, Pontificia, Antiquísima, Ilustre, Penitencial y ahora también Franciscana Hermandad y Cofradía con sede en la Iglesia de Santiago.
La exposición nos invita a realizar un recorrido por cinco ámbitos. Y como te decía, sirven para conocer mejor a la Columna, pero también a la esencia de las cofradías zaragozanas, dado que a lo largo de estos 75 años han sabido coger lo mejor de cada casa, unirlo a sus propias iniciativas, pasarlo por el tamiz rojo y blanco, dorado, plateado y forjado y dar forma a una organización de la que, sin duda, pueden sentirse orgullosos. Mis íntimos hermanos cofrades de los ochenta pueden dar fe que siempre he sentido debilidad por esa organización, espejo donde aprender desde el gesto del brazo para tocar el bombo (todos por igual) a ganar un concurso de tambores, pasando por sus publicaciones, primeras iniciativas culturales (añoramos aquellas escapadas juveniles a la Sala Barbasan) y por supuesto la formación cofrade en todos los niveles imaginables, además de en fe, caridad y fraternidad.
Así, el primer espacio es el de su origen que se remonta a 1804 incluso antes, y que une a la cofradía de Semana Santa con una Antigua Hermandad, como le ocurre a otras de nuestra ciudad. El segundo espacio nos introduce en su incorporación a la Semana Santa en 1940, por los mismos motivos que tantas asociaciones en aquellos años y en torno a un paso propiedad de la Sangre de Cristo. Y esta es una de las suertes de la exposición, poder contemplar el Cristo atado a la Columna de Llovet a la altura de los ojos rodeado de las dañadas imágenes que realizara Borja a principios del XX para sustituir las piezas desaparecidas de León. Y como remarcaba orgulloso Nápoles, estas imágenes y la del Cristo fundacional, las únicas piezas que no son propiedad de la cofradía.
Pasamos así al sitio dedicado al inicio del patrimonio en torno a la monumental escultura de Bueno del Señor atado a la Columna, pues como pasa en la mayor parte de las cofradías tarde o temprano (y esta fue de las primeras) todas aspiran a tener su paso propio. El siguiente espacio denominado "Altar de las Insignias" pues se dispone a semejanza de los "Altares de Insignias" tan frecuentes en otras latitudes, nos muestra todo el poderío de los atributos de la Columna, lo que antes te decía... que tienen de todo, hasta un relicario con la reliquia de la Santa Columna y sus certificados correspondientes... de todo....de aquí y de allá. Y todo queda bien justificado y aclarado en la explicación impartida, del mismo modo que en el primer espacio se nos explicó el motivo de la bandera y del significado de los títulos RPAIP y ahora Franciscana que en las últimas décadas han ido apareciendo por delante de "la Columna" cariñosamente, y economizando palabras, memoria, espacio y esfuerzo, denominada por todos.
Antes de pasar al último sitio, no podemos olvidar dentro del patrimonio, especialmente humano y cantera de cofrades de esta Hermandad, a su admirada sección de instrumentos. Si antes he dicho que viendo a la Columna en la calle te podías llevar una impresión de lo que es una cofradía zaragozana al tener de todo, quizá lo de los tambores quedaria algo magnificado en relación a la mayoría de secciones. Hablamos de más de 500.
La última parte del recorrido está dedicada a su Virgen de la Fraternidad en el Mayor Dolor. Como decía Nápoles, la incorporación de esta imagen, además de cubrir la vocación mariana de la mayoría de nuestras cofradías, dio mucho juego a la vida de la Hermandad y al enriquecimiento del patrimonio. Impresionante el ajuar de la Virgen, todo donaciones o realizado por cofrades, además de tener un paso de palio al estilo zaragozano (esto me lo acabo de inventar yo... ¿pero a que es verdad?)
Que más te puedo contar. Que visites la exposición, que si es guiada y comentada mejor. Que motivos tienen para estar orgullosos de su cofradía y el resto para estarlo por formar parte de nuestra Semana Santa. Ahhh... y que compres el foto-libro de la exposición. Acepto que me lo regale alguien, pues me gasté el dinero aquel día en el del 200 aniversario, y en casa están hartos de mis dispendios cuaresmales... y aún no hemos entrado.
Una pequeña corrección: Aún no llegamos a los 500 en la sección de tambores, pero no pasa nada... Una carta preciosa, como todas las que escribes Jorge!! :) Un saludo!!
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